miércoles, 18 de abril de 2007

Libro electrónico (I), Primeras pruebas del PRS 500


Por fin tengo un lector de libros electrónicos en mis manos. En concreto, el Sony PRS-500. Es un lector de papel electrónico.

Lo compré en Estados Unidos hace un par de semanas, gracias a un colega que iba para allá y pudo traérmelo, dado que en Europa no se vende aun.

La primera sensación cuando lo recibí es lo pequeño que era. Me había hecho a la idea de que sería bastante más grande, pero la verdad es que es del tamaño de la mano, algo más grande que una PDA pero sin llegar al tamaño de los más pequeños portátiles.

Los primeros pasos la verdad es que fueron de lo más sencillo. El dispositivo venía con algo de carga y con 15 libros digitales para probar, todos ellos en inglés, obviamente. En algunos casos eran libros completos, en otros extractos de libros.

El uso no tiene mayor historia: dos botones en el lateral izquierdo para ir a la siguiente página y a la anterior. Otro botón para cambiar el tamaño de letra, también en el lateral. Este botón también sirve para poner el texto en vertical y en apaisado. En la parte inferior, una especie de círculo que también sirve para pasar las páginas y un botón para marcar un punto determinado de un libro (como lo que sería doblar una página). Por último, abajo a la derecha, un botón para navegar por los menús, que no es que sean demasiado complejos.

Sobre la marcha, instalé el software incluido y lo conecté al ordenador. Sencillísimo y sin problema. Primera prueba, meter todo tipo de documentos a ver qué hacía. Resultados obtenidos:

  • Documentos de texto. En formato .DOC, .RFT, etc. Los lee perfectamente y además, son una muy buena opción. Al no estar el texto preparado para impresión, permite que el lector digital sea capaz de redimensionar las líneas y demás cuando cambias el tamaño del texto, con lo que funciona muy bien.
  • Documentos PDF. Funcionamiento horrible, lo contrario del anterior. Al estar ya formateados, el cambio de tamaño lo único que hace es un pequeño zoom que no es suficiente para leerlos correctamente. Lo desaconsejo.
  • Libros electrónicos. Obviamente, los idóneos. Funcionan igual que los .RTF pero mejor, ya que en este caso es capaz de conservar adecuadamente las cabeceras, por ejemplo.
El lector tiene unos 64 Mb que, en principio, son más que suficientes para 30-40 libros. Además, tiene una ranura para tarjetas de memoria, con lo cual realmente la capacidad es más que ilimitada.

¿Y la calidad de lectura? Esta era la gran preocupación. Es un papel electrónico, por lo que la calidad debería ser buena. Y lo es. La verdad es que es muy buena. Únicos defectillos: la pantalla no es muy grande, pero el tamaño es bueno y que han protegido el papel con una especie de cristal, con lo cual se produce un cierto reflejo de la luz. Debido a ello, la sensación es más de estar leyendo papel satinado (como de revista) que papel de periódico o de libro.

¿Se puede leer un libro? Es decir, ¿se puede usar durante largos intervalos? Rotundamente, sí. Absolutamente sí. En un viaje reciente leí "La Catedral del Mar", que había empezado en la versión en papel. Sin problema. Se ve que al dispositivo a veces le falta un poco de usabilidad, que seguro mejorará con el paso del tiempo, pero el resultado fue muy bueno. Lo mejor de todo: estaba de viaje, acabé un libro y empecé a leer otro sin tener que llevar más peso en la maleta. No esta nada mal.

(continuará en próximos días).

2 comentarios:

Gonzalo Moreu dijo...

Hola Jacques, la verdad es que parece un gadget de lo más interesante. A mi me preocuparía saber la duración de la batería. ¿Alcanza por lo menos la lectura de 1 libro completo (10-15 horas al menos)? ¿Es necesario viajar con un cargador más? Ya nos contarás más en detalle.

Un saludo, Gonzalo

Anónimo dijo...

Genial Jacques,

saludos
Felipe GMP