lunes, 1 de agosto de 2005

Nikon: cómo canibalizar a tus propios clientes

Ya sabemos que a muchas empresas de la fotografía tradicional, el paso a la fotografía digital se les está atragantando. No hay más que ver los casos de Agfa o de Kodak.

Otro de los que parece condenado a autocanibalizarse es Nikon. Veamos el tema. Durante años, los fotógrafos profesionales, semiprofesionales y aficionados de alto nivel solían tender hacia Nikon (o hacia Canon, pero la verdad es que Nikon siempre estaba un paso por delante). Estos fotógrafos realizaron, en su momento, cuantiosísimas inversiones, no solo en cuerpos de cámara Nikon (los archiconocidos F1, F2, F4, F801, F90, F70, etc.), sino también en todo tipo de objetivos y en accesorios para los mismos.

En un momento determinado, aparece la fotografía digital. Todo el mundo se convence que habrá que darle carpetazo al cuerpo analógico. Pero los objetivos (que costaron una pasta) parecen claramente una inversión aun aprovechable.

Pero, ¿qué ocurre? Que Nikon, en un alarde de inteligencia, empieza a sacar cámaras digitales que NO ACEPTAN OBJETIVOS Nikon antiguos. ¡¡Qué bonito!! Y va Fuji y saca cámaras que Sí ACEPTAN OBJETIVOS Nikon antiguos. ¿El resultado? El que cabría esperar. Ya conozco unos cuantos amigos que han optado por comprar cuerpos digitales Fuji para así poder aprovechar los objetivos que ya tenían.

Interesante forma de echar a tus clientes, no cabe duda. Digno de mención en los anales de torpeza empresarial.