miércoles, 20 de diciembre de 2006

Series de TV y nueva era (I). Mujeres desesperadas (Desperate housewives)

Los tiempos cambian. Hace no mucho, vivíamos plegados a las decisiones de los programadores de televisión del país en que uno viviera. Si ellos consideraban que una serie era interesante, la veías. Si no, te quedabas sin ella. Eso, por supuesto, sin contar con que decidieran ponerla a un horario disparatado, cambiarla de lugar en la programación cada dos semanas o que la llenaran de 45 minutos de anuncios por cada 5 de contenido. De pensar en verla en versión original, ni lo pensemos.

Gracias a Internet, esto está cambiando. Veo poco la televisión, pero a mi juicio, Mujeres desesperadas es una serie de culto; y clasifico así pocas cosas, quizás Cheers y poco más hasta ahora. La primera temporada de Mujeres se emitió en España en TVE1 con un cierto respeto por la serie. Tuvo éxito, por lo que he leído. Como tuvo éxito, decidieron que era el momento de destrozarla. La segunda temporada la empezaron emitiendo otro día y en otro horario. Como no pareció suficiente destrucción, la cambiaron 2 ó 3 veces más de horario, hasta que fue bajando en cuota de pantalla.

De la tercera temporada no hay noticia de si se emitirá o no. Pero, la verdad, me da igual. Los americanos la emiten los domingos por la noche, en el prime time de ellos. El episodio que se emite un domingo está disponible en la red tres días después en versión original con subtítulos en castellano. Subtítulos, por cierto, traducidos por voluntarios. No sólo la ves con los actores hablando con sus voces, sino que, además, mejoras el inglés; y, además, sincronizada con la época del año en que la ves (por ejemplo, ves en navidad los capítulos de navidad, ya que la serie trata de respetar el tiempo histórico).

¿Podemos siquiera pensar en que cuando se emita en España la tercera temporada los genios de TVE aprovechen la tecnología del TDT y envíen la señal con dos bandas sonoras y con los subtítulos? No creo que haya nadie con suficiente inteligencia en esa casa como para siquiera pensar en esta posibilidad.

Cada vez hay menos fronteras. Y, a pesar de lo que muchos intentan, los bits se mueven a su libre antojo. Y los consumidores somos cada vez más libres de consumirlos libremente. A pesar de los "Inútiles Desesperados" (propuesta de titulo para el futuro) que buscan levantar inexistentes fronteras para que hagamos lo que ellos dicen.

No hay comentarios: