miércoles, 16 de abril de 2008

La fábula de los ingenieros informáticos y los PCs comprados a trozos

"Fábula de los ingenieros informáticos y los PCs comprados a trozos"

El otro día estuve buscando coches. Vi varios modelos que me gustaban, pero al final ninguno me convenció. Unos eran muy grandes, otros no tenían la potencia que yo andaba buscando, otros no me permitían poner los extras que yo quería. Lo peor de todo es que los precios me parecieron excesivos. Desde luego, los fabricantes pretenden quedarse con un dineral sólo por ensamblar las piezas y ponerle una etiqueta al coche. El tema es que, como siempre me han gustado las revistas de coches y conozco bien el sector y tengo unos cuantos colegas que trabajan en él, decidí montarme mi propio coche.

Primero acudí al taller de mi colega Pedro, que me vendió un chasis impresionante, precioso, e incluso fue capaz de pintármelo en el color azul oscuro que me encanta. Después fui al concesionario de VW y compré el motor que siempre había deseado, uno de un Golf GTI. Las ruedas las compré Michelin, las mejores. Luego, los interiores de BMW, de una calidad impresionante. El resto de artilugios (suspensiones, barras de transmisión, palanca de cambios y demás cuestiones) las compré en una tienda que trae productos de China buenísimos y que me han dicho que son los que fabrican para Mercedes.

La semana que viene he quedado con un colega que hizo FP y un par de cursos de la Escuela de Ingeniería de la universidad para montar el coche. A ver si para el año que viene consigo las perras para ponerle los airbags, la radio y algunas cosillas más.

Es curioso, los colegas que estudiaron en la universidad dicen que mejor me compro un coche de esos que vienen ya completos, de un fabricante conocido. Como se nota que nunca se han ensuciado las manos comprobando lo divertido que puede ser montarse un coche de forma independiente.

Mi padre tiene una empresa de 10 camiones, que compró, a pesar de mi consejo en sentido contrario, a uno de esos fabricantes. Ya le he dicho que cuando acabe con mi coche empiezo a montarle camiones para la empresa. Además, en los camiones le voy a poner unas antenas para la radio que son mucho mejores que las que vienen en los que tiene ahora. Seguro que los conductores van a estar encantados...

¿Por qué si esto parece ridículo no nos lo parece comparnos un PC a trozos? ¿Se imaginan los problemas mecánicos que el amigo constructor de coches podría tener? ¿Y cuando le falle será culpa de Mercedes, de BMW, de VW o de los chinos?

A mi también me gustaría hacerme un coche a medida. Este coche, pero con un poco más de espacio atrás. Este otro con mayor motor. Este con un diseño más novedoso. Pero no podemos. Hay una serie de modelos comprobados, que han pasado los test de seguridad, que están adecuadamente dimensionados por el fabricante. Diseñados, verificados, garantizados por ingenieros. Evidentemente, también fallan. Pero aceptamos el funcionamiento.

Pero seguimos considerando la informática como un casi-pasatiempo. Algo en lo que meter las manos cuando no tenemos nada mejor que hacer. Como directivos nos gusta discutir sobre si un sistema operativo es mejor que otro, sobre si el ordenador de nuestros trabajadores debería tener más o menos disco duro, sobre si la pantalla tiene que tener sound-bar o altavoces externos.

Si quieres gestionar bien la informática de tu empresa, opta por la asepsia. No te metas. Compra cosas probadas y garantizadas. Con garantía de 3 ó 4 años. Cuando finalice la garantía, cambia de modelo. Y, si tienes la tentación irresistible de acercarte a la tecnología, analiza la información; qué haces con ella; quién la recibe; para qué la usa.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Comprar un vibrador sería como empezar a comprar un hombre a trozos?

Anónimo dijo...

la verdad es que es muy bueno. hbg.