Claro, el problema es que como uno vaya con la sinceridad por delante y no responda lo que el cerebro del que hizo la pregunta está preparado para oir, se monta el pollo. Como seas sincero, obtendrás una de las siguientes respuestas:
- Extrañeza - "Pues es raro que no le haya gustado, porque, en general, todo el mundo queda muy satisfecho"
- Desprecio - "Bueno, quizás es que usted no sabe que este plato se elabora con el ingrediente XXX que es lo que le da ese sabor YYY que le disgustó"
- Chulería - "Eso es totalmente imposible"
- Discusión y reto - "A ver, dígame en qué hemos fallado" y el tipo ya pensando en posibles respuestas para dejarte callado
- Enfado e incluso casi insulto
¿Han tenido experiencias de protestar/sugerir? ¿Qué respuesta obtuvieron?
La verdad es que yo, para evitar situaciones chungas, siempre me voy por el "todo estupendo" aunque no fuera así. Solo una vez he tenido el valor de decirle al servicio que aquello no se podía comer y me cambiaron el plato por otro. Supongo que sería el hambre que tenía.
ResponderEliminarUn saludo